Por Francisco Rivera Cruz
Por su belleza natural, la Costa Michoacana es el sitio ideal para que los viajeros puedan disfrutar de unas vacaciones con la familia o los amigos, apuntó la Secretaria de Turismo de Michoacán, Claudia Chávez López.
Señaló que en este verano si el turista prefiere el litoral michoacano podrá descubrir playas vírgenes, entablar contacto con la naturaleza, conocer la cultura local y una gastronomía típica.
En Barra de Pichi existen excursiones en lancha para ver los manglares y buscar cocodrilos, mientras que Mexcalhuacán y en Pichilinguillo, ubicados en una pequeña aldea de pescadores, son opciones en donde los amantes del buceo pueden hacer inmersiones.
Si se llega por la autopista Siglo XXI y de inmediato se quiere disfrutar de la costa, está el corredor gastronómico Eréndira-Playa Azul, que sobre el boulevard oferta en enramadas, el sazón de cocina tradicional con alta cocina en platillos a base de pescado y mariscos.
A lo largo de toda la costa, se puede disfrutar de la frescura de las palmeras y sus derivados: agua de coco,c ocadas y empanadas de coco.
Chávez López, responsable de las políticas en turismo de Michoacán, destacó que la Bahía de Maruata es probablemente uno de los enclaves más bellos de la Costa, con formaciones rocosas, palmeras, selva y un estero perfecto para avistar aves marinas.
Resaltó las legendarias y arenosas playas de Faro de Bucerías, en donde es posible bucear para ver fragmentos de un barco hundido.
Expuso que la Costa Michoacana también es un destino perfecto para el surf, con las mejores playas para practicarlo como Nexpa, La Ticla, San Juan de Alima y Playa Azul.
También destacó la gastronomía tradicional en los paradores ecoturísticos indígenas que se encuentran en Maruata, Colola –Santuario de la tortuga negra–, Faro de Bucerías, La Manzanillera, Palma Sola, La Ticla, Ixtapilla y Tizupan, entre otros.
