Por Rafael Rivera Millán
Un presunto asaltante resultó herido durante la madrugada de ayer, por “alguien” que se percató cuando junto con otro individuo ingresaban por la parte trasera de las oficinas de la ex Comisión Ejecutiva para el Desarrollo Integral de la Costa Michoacana, donde se ubican varias dependencias, con la intención de robar equipo oficial y pertenencias de los 20 empleados estatales que ahí laboran, por lo que al escuchar los balazos, vecinos dieron la voz de alerta al 911, acudiendo al lugar elementos de la Policía Michoacán, quienes encontraron dentro del inmueble a un sujeto herido de bala.
Desde hace más de una semana, los 15 empleados sindicalizados afiliados al STASPE y otros 5 más bajo contrato, que laboran en las oficinas regionales de Turismo, Sedrua, Compesca, Servicio Estatal del Empleo, Contraloría y otras más, habían anunciado un paro de brazos caídos para exigir al gobierno del estado que atendiera su demanda de dar mayor seguridad al inmueble y a ellos mismos, ya que hasta esa fecha sumaban 8 robos de computadoras y material de oficina y objetos personales que, según se sabía, dos sujetos jóvenes, los cometían, utilizando una escalera para brincar desde el viejo malecón hacia las instalaciones que un tiempo fueron la residencia oficial del gobierno del estado (Casa de Gobierno).
No se sabe quién lesionó al presunto delincuente que fue identificado como José Luis P. L., el cual fue hallado lesionado de un balazo dentro de esas oficinas que se ubican junto a las de la sección 271 del Sindicato Minero, en calle Río Tepalcatepec del Primer Sector del Fidelac.
Esta situación motivó que ayer miércoles los 20 empleados (sindicalizados y bajo contrato), no ingresaran a laborar. Antonio Partida, líder regional del STASPE señaló que estaba a la espera de indicaciones de su dirigente estatal Antonio Ferreira Piñón y de lo que les dijeran en la Fiscalía Regional, cuyos agentes recomendaron a los empleados no ingresar hasta que peritos terminaran las actuaciones de ley, entre ellas, toma de huellas que habrían dejado los presuntos asaltantes.
Se dijo que este era ya el décimo segundo asalto que sufrirían esas instalaciones, y aún así el gobierno del estado no ha comisionado a personal de seguridad para vigilar el inmueble, situación que a los empleados les incomoda, pues temen que no solo de noche pretendan ingresar a asaltar, sino de día, estando ellos ahí, y como la mayoría son mujeres, temen no poder hacer frente a los delincuentes o sufrir graves daños físicos que pongan incluso en peligro su vida.
