Ilegal el bloqueo de accesos y colocación de banderas rojinegras: ArcelorMittal

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Bloqueos ilegales han ocasionado fuertes impactos en la operación, incluyendo el embancamiento del Alto Horno, dice la acerera.

Mediante un comunicado de prensa, la empresa acerera ArcelorMittal, señaló ayer que desde el pasado 24 de mayo, las instalaciones de la planta siderúrgica en el municipio de Lázaro Cárdenas y la mina ubicada en la Tenencia La Mira en el estado de Michoacán, han sido bloqueadas ilegalmente por un grupo de trabajadores pertenecientes a la Sección 271 del Sindicato Minero, debido a su inconformidad con la repartición de utilidades, a pesar de que la empresa ha cumplido con la dispersión correspondiente conforme a la ley.

Desde el 28 de mayo, la empresa fue notificada sobre el emplazamiento a huelga para hoy 4 de junio de no lograr un acuerdo. Durante una audiencia ante el juez laboral el pasado 3 de junio, y apegado al artículo 927, fracción VII, de la Ley Federal del Trabajo, el sindicato minero solicitó ampliar el período de pre-huelga, por lo que el estallamiento de huelga queda asentado para las 12 horas del 11 de junio de 2024.

Es importante señalar que además de la ilegalidad del bloqueo, la colocación de banderas rojinegras en los accesos tanto de la mina como de la planta siderúrgica por este grupo de personas no oficializa la huelga, ya que esto se encuentra fuera del procedimiento que se lleva a cabo ante el Tribunal Laboral Federal de Asuntos Colectivos con sede en la Ciudad de México.

La empresa ha anunciado que, a fin de mantener la seguridad dentro y fuera de la planta laboral, tuvo que embancar el alto horno, lo que implica implementar procesos para asegurar la producción y de este modo mitigar los riesgos que pudieran derivar incluso, en una tragedia, al no contar con la total seguridad operativa.

El bloqueo ilegal que hoy cumple 11 días ha resultado en la pérdida de más de 100 mil toneladas de producción, generando una crisis operativa y financiera con graves repercusiones económicas. Estos eventos no solo ponen en peligro la continuidad de nuestras operaciones, sino también la estabilidad laboral de nuestros colaboradores y el bienestar de sus familias, afectando negativamente la economía de la región.