
* Ante el grave daño que causa el plástico a la vida marina, el Colectivo Azulita organiza torneo de Pesca de Basura.
Por Francisco Rivera Cruz
Haciendo eco de las organizaciones que alertan que los microplásticos, invisibles a simple vista, afectan gravemente a los peces, organismos invertebrados y otros animales filtradores que tienen el potencial de entrar en nuestra cadena alimentaria, se está convocando al torneo “Pesca de basura”, que se llevará a cabo en esta ciudad.
El Colectivo Azulita, en coordinación con el Club de Surf y Salvavidas de Lázaro Cárdenas, invitan a la primera edición del torneo Pesca de Basura, con el propósito de fomentar una cultura “no de limpieza sino de no producir basura y no ensuciar” nuestras playas.
La actividad que busca concientizar sobre lo desastroso que empieza a resultar el descuido de no saber manejar nuestra basura, se llevará a cabo en Playa Eréndira el próximo domingo 29 de septiembre, y podrán participar equipos de un máximo de cinco integrantes, que se activarán de las 4 a las 7 de la tarde.
Las inscripciones se recibirán desde el 20 de septiembre y cerrarán el día 28, en las redes sociales del equipo organizador. La actividad consistirá en levantamiento de desechos, como plástico, cartón, vidrio, es decir todo tipo de empaques llevados por los humanos o las corrientes de agua a la zona de playa.
Para los tres equipos que reúnan el mayor monto de residuos o desperdicios, habrá premios y reconocimientos, gracias a empresa y particulares que los aportarán como resultado de la gestión de los convocantes.
Se está planeando una pequeña charla sobre los micropláticos y su ya preocupante impacto negativo en la salud de la cadena marina y los humanos, además de una muestra gráfica del grave problema de la basura plática en ríos y mares.
Ambientalistas estiman situación alarmante en los mares, ya que se ha estudiado que, en los peces, los microplásticos pueden causar bloqueo intestinal, desnutrición y acumulación de tóxicos, con la agravante que si en esas etapas son capturados y llevados a la mesa o platillos de la gente, terminan en los intestinos humanos.




