La adolescencia y alcoholismo

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Por Dr. Manuel Portillo Serrano

Gastroendoscopía/Gastrocirugía

La adolescencia es esa etapa en que el niño está dejando de serlo y está cursando en esa etapa de transición de niño a adulto, y justo en esa etapa esa persona es sumamente vulnerable y fácilmente impresionable por las actitudes de los adultos o la de sus compañeros de adolescencia, tratando de ser siempre aceptados llegan incluso a ser hasta temerarios y esto hace que no midan las consecuencias que sus actos pueden tener, no le tienen miedo a casi nada.

En esta etapa de la vida es donde ese paciente tratará de quedar bien y ganarse la empatía de todo el mundo, es en esa fase justamente donde aparecen drogas, novias, juegos peligrosos, uso de enervantes y, claro, el alcoholismo; son estos jóvenes, tierra fértil para sembrar todas estas dudas y problemas y si consideramos que el alcohol es la sustancia tóxica más usada por esos niños en fase previa a ser adultos, y esta adicción los llevará a consecuencias como múltiples accidentes de automóvil, accidentes con armas de fuego o punzocortantes, a envalentonarse para tener relaciones sexuales sin protección y el valor para desarrollar el tan terrible homicidio y les genera el valor suficiente para realizar hasta un suicidio.

Estos adolescentes son personas que, siendo aún casi niños por la edad, en la que inician con alcoholismo, les ocasiona más daño la ingesta de ese alcohol que a un adulto, ya que están agrediendo con el alcohol un cerebro que aun no alcanza su madurez total.

El problema serio inicia desde los 11 años, pero es entre los 13 y 17 años, donde esta situación es aún más delicada, ya que algunos de esos jóvenes tienen ingestas altas de alcohol, incluso más que un adulto. Y desgraciadamente los porcentajes de esos adolescentes alcohólicos cada vez son más altos.

Un adolescente debe estar retirado del alcohol, ya que su mentalidad deberá estar a esa edad, en su estudio, en su deporte y en una vida sana, es imprudente y hasta grosero que en una reunión los adolescentes menores de 15 años ya esté ingiriendo bebidas alcohólicas y como la sociedad lo permite, se desarrollarán importantes problemas de conducta en esos jóvenes, sin saber que algunos de ellos serán alcohólicos o morirán en su juventud por las consecuencias que deja la ingesta de alcohol en una forma desmedida, ya sea por un accidente vial, por suicidio o por una lesión por arma blanca, o algo que se ha visto cada día más común, por una intoxicación aguda que es mortal.

El INAAA (Instituto Nacional sobre el Abuso del Alcohol y Alcoholismo), sugiere no más de 14 g de alcohol en las ingestas diarias, hablamos de 0,6 onzas o 1,2 cucharadas, el equivalente a una cerveza, o a una copa de vino de 5 onzas o un trago de 1.5 onzas de bebidas destiladas, si ve, es muy poco lo permitido, casi nada, y estas cantidades son fácilmente rebasadas, de aquí que se deberá vigilar que la concentración de alcohol en sangre, la llamada CAS, no sea superior a 0.8 % en un individuo, arriba de eso ya podremos hablar de embriaguez, que son los estándares que detecta el alcoholímetro que se mide en las calles a los conductores, haciéndolo ya en varios países del mundo, incluido Mexico.

Estas cifras  nos hablan de la vulnerabilidad de la juventud, estas cifras tan alarmantes tanto en hombres como en mujeres son absolutamente rebasadas, y colocan a los jóvenes en un sitio distinto a un adulto, ya que llama la atención que un adulto pueda dejar de tomar en su adicción al alcohol y el joven no, haciendo así que la dipsomanía en los jóvenes sea más agresiva, y desarrolla cambios importantes no solo en su aspecto mental, sino en la salud de ese joven, y desgraciadamente podría ser parte de las estadísticas que hay en todos los periódicos, predominantemente los fines de semana, apareciendo en accidentes automovilísticos, además con consecuencias fatales, por conducir bajo la influencia del alcohol y manejar con alto riesgo de un accidente.

¿Cuántos de esos chicos se convertirán en alcohólicos, cuántos de ellos cambiarán el alcohol por drogas, cuántos serán bebedores compulsivos, cuántos tendrán alteraciones mentales serias por haber ingerido alcohol a muy temprana edad?

Ya ve, querido lector, cómo un adolescente no debe tomar, y nuestra sociedad ve con el menor recato cómo los adolescentes toman en una forma exagerada en sus fiestas.

Gracias por leer este artículo.