Por Francisco Rivera Cruz
Un pequeño levantamiento de opiniones sobre el movimiento magisterial, arroja que los ciudadanos están de acuerdo con que los maestros reclamen pero no como lo hacen, porque afectan a la población y no al gobierno, que se debería entender como su objetivo. Cabe señalar que la mayoría rehuía opinar y algunos quisieron ocultar su identidad.
“Desde luego que si el gobierno les debe, que les pague, pero si como dicen (los maestros) van años sin que les cumplan, porque no ser más propositivos ya que al hacerse de las vías del tren, están afectando empleo e imagen del Puerto y no de Silvano o de Andrés Manuel”, expuso un agente naval.
“(Por lo visto) Quieren matar al Presidente Andrés Manuel de un coraje. Creo que más inteligente sería que si ya tuvieron los ojos del mundo y llamaron la atención de la televisión y la prensa, con Televisa y Tv Azteca, ya es momento de replegarse para esperar a que el gobierno haga su parte”, dice Patricia, locataria de una plaza comercial de la ciudad.
“Yo sí digo que si se mantienen bloqueando al tren, ya es chantaje, y por lo que afectan, que se atengan a las consecuencias, si piden que se aplique la ley a otros, que prediquen con el ejemplo”, agregó la comerciante.
Un obrero en la industria local, en el tema compartió: “Publica que estamos con los maestros, que por vez primera tienen razón. Me harta que los niños estén sin clases, pero ya nos acostumbramos a los paros. Y esta vez estamos apoyándolos”.
“Es lo malo de tener gobiernos valemadristas y maestros sin vocación. Si tuvieran voluntad, harían acuerdos perdurables”, externó José Luis, locatario del mercado Cuauhtémoc, quien lamentó que la economía esté viéndose afectada por un conflicto en el que se ocupa de consensos “y no de ver quién puede más”.
Por su lado, un promotor del deporte, dijo que como integrante de la sociedad lazarocardenense, que se está viendo afectada por el diferendo entre maestros y gobierno, lo que desea es que hay pronto acuerdo. “Ojala la imagen del Puerto, las pérdidas y la necesidad de construir, lo pongan por delante”.
Finalmente, un profesionista del mundo del diseño, opinó que nadie “en su sano juicio” denunciaría a los maestros por estar violando el derecho de niños y jóvenes a la educación, “para no tenerlos de enemigos”, así que esperaría que los propios maestros recapaciten que “si ellos se dicen violentados, ellos también están violentando”.
