Nuevamente “Mar de Fondo” causa severos daños a enramaderos de LC

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El fenómeno meteorológico conocido como “Mar de Fondo”, nuevamente estuvo causando daños ayer a las enramadas turísticas de Playa Eréndira y Playa Jardín.

Por Rafael Rivera Millán

El fenómeno climatológico conocido como “Mar de Fondo”, este fin de semana estuvo provocando severos daños a enramadas turísticas ubicadas en la zona de Playa Eréndira y Playa Jardín. En fotografías y videos enviados a la redacción de este diario por Pánfila Beltrán Arreola, dirigente de los enramaderos de ese sitio, se pudo observar los estragos causados por el fuerte oleaje.

De acuerdo con uno de los reportes meteorológicos enviados ayer a esta redacción por la Capitanía Regional de Puerto de este lugar, se informaba que el huracán “Estelle”, categoría 1, se había localizado a las 16:00 horas del domingo 18 de julio, a aproximadamente 270 millas náuticas, unos 500 kilómetros al suroeste de Manzanillo, Colima, con vientos máximos sostenidos de 75 nudos por hora y rachas de 90, con las de 12 a 16 pies de altura, y que su desplazamiento era hacia el oeste-noroeste, con una velocidad de 10 nudos por hora.

Se alertaba tomar todo tipo de precauciones, para la navegación mayor, ya que para la menor el puerto michoacano continuaba cerrado para las embarcaciones de pescadores ribereños, lanchas de recreo y pesca deportiva, por las condiciones atmosféricas que eran favorables para su intensificación en las próximas horas a huracán categoría 2.

La Capitanía Regional de Puerto señalaba en su boletín del Servicio Meteorológico Nacional, que el evento de “Mar de Fondo” continuaría en el litoral michoacano, con oleaje de 6 a 8 pies de altura, desde la línea de costa hasta las 200 millas, incluso desde Chiapas hasta la costa sur de la Península de Baja California.

La líder de los enramaderos indicó que el domingo por la tarde, sus compañeros prestadores de servicios se encontraban trabajando a marchar forzadas, para tratar de poner a salvo mobiliario y otros objetos de trabajo, ya que el mar estaba socavando parte de sus enramadas, como ha ocurrido ya en otros años.