Pese a la normatividad, en LC se consume carne de dudosa calidad

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Alertan por consumo de carne de mala calidad en LC.

Existe normatividad para el manejo de carne en rastros, que recomienda medidas de cuidado para que el producto llegue con calidad e impurezas a las carnicerías y de ahí a la mesa o lugar en que se sirva como alimento.

También, en el caso de los animales, recomienda las medidas de alimentación, cuidado y trato durante la matanza; y de paso el manejo en carnicerías que deben dejar de tener y exhibir el producto a la intemperie ya que clima, polvo y moscas son contaminantes, además que apuran la descomposición.

Trasciende que se lleva semanas de capacitación y esfuerzos porque se asuman tales acciones aquí en Lázaro Cárdenas, encontrando fuerte resistencia de tablajeros que argumentan que tradicionalmente los clientes llegan a pedir de donde están “colgados los tasajos” y si ponen la carne en vitrinas, “van a creer que no es producto fresco”.

Mientras eso pasa, y para proteger a la población de intoxicaciones por clembuterol, la autoridad sanitaria a través de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris), capacitó en materia de control de rastros y clembuterol, dentro de la Red Jurisdiccional de Municipios por la Salud.

La capacitación fue sobre la legislación vigente aplicable a rastros y el uso de anabólicos, con el objeto de dar a conocer las sanciones a las que pueden hacerse acreedores por poner en riesgo la salud de las familias, si estas consumen carne engordada con clembuterol.

Autoridades municipales se comprometieron en este marco de capacitación a realizar proyectos para optimizar las instalaciones de los lugares de matanza, mejorar las prácticas sanitarias y contribuir a la capacitación del personal que labora en rastro, así como a integrantes de las asociaciones ganaderas.

El objetivo es que implementen las normas sanitarias  vigentes y las buenas prácticas de higiene, lo cual, en el caso de Lázaro Cárdenas, permitiría incluso que los tablajeros se conviertan en proveedores de empresas e instituciones y de los barcos que arriban a Puerto Lázaro Cárdenas.

La NOM-033 los obliga a evitar el sufrimiento innecesario de los animales, mediante un aturdimiento controlado, previo a quitarles la vida. A lo cual, la Igualdad Animal encontró no solo incumplimiento de dicha normatividad, sino crueldad contra el ganado y todavía escasas medidas sanitarias durante el traslado y la venta en carnicerías.

Pese a todas las ventajas que representa el cumplimiento de la normatividad, los tablajeros se resisten a cambiar, con lo cual, según señalan investigadores, se termina consumiendo carne de dudosa calidad.