Por Ángel Méndez
Aquila, Mich., 1 de octubre de 2022.- A casi dos semanas de ocurrido el terremoto de magnitud 7.7 que tuvo su epicentro en la costa de Aquila frente a la playa de Cachán, aún hay localidades de la costa/sierra nahua incomunicadas como es el caso de las rancherías El Limoncito de San Antonio y Barranca de López entre otras del sur del municipio, donde los caminos están bloqueados por los derrumbes y no sido abiertos al paso de vehículos por falta de maquinaria, principalmente.
Encargados del orden de localidades del sur del municipio de Aquila, expresaron su angustia y desesperación por la situación crítica que viven los habitantes de estas rancherías después del terremoto, indicando que los han dejado solos, que no han recibido ningún apoyo ni visita de ninguna autoridad a conocer los daños sufridos a causa del fuerte movimiento telúrico registrado el 19 de septiembre, y que están apenas sobreviviendo con grandes necesidades de alimentos y de ayuda para reparar los daños de sus viviendas.
En la página de Facebook del Ayuntamiento de Aquila, se informa textualmente que: “Por Instrucciones del presidente municipal Chema Valencia, todo el equipo de maquinaria se encuentra trabajando día y noche sin parar para abrir las brechas y caminos que fueron afectados por el sismo del día 19 de septiembre, que provocó derrumbes bloqueando completamente los caminos con rocas y árboles, por lo cual se requiere abrir las brechas o caminos de las rancherías que comunican con la costa para que los ciudadanos puedan bajar a abastecerse de víveres”.
“Los caminos que se están atendiendo por ahora son de La Cuirla, Pomaro a Maruata y Chacalapa, distribuyendo los equipos de maquinaria en las tres zonas que se están atendiendo.”
Finalmente, las autoridades auxiliares del ayuntamiento en el sur del municipio de Aquila, pidieron a los tres niveles de gobierno que no los olviden, que no los dejen solos, que manden maquinaria para retirar los derrumbes de los caminos porque sin máquinas no pueden abrir paso, y también que vayan a censar los daños a sus viviendas, y el Dif a llevarles despensas, destacando que todo lo mencionado urge.
