Por Francisco Rivera Cruz
Autoridades que van y vienen y hasta se reeligen, han sido enteradas que un canal pluvial se convirtió en “río contaminante de aguas negras” que afecta la salud de cientos y cientos de habitantes de al menos 10 colonias en periferia de la ciudad, sin que hagan algo al respecto, denunciaron afectados.
Problemas de salud en piel, garganta, vista y de tipo gastrointestinal, les son comunes, sobre todo a quienes están más cerca de paso del canal, que originado en la zona de La Orilla, cruza colonias como Lucio Cabañas, Polanco, 3 de Mayo, México, Paraíso, Samuel Ruiz y Unidad y Progreso.
Muchos que llegan a cargos públicos, cuando candidatos se acercan y toman nota, y sin embargo el problema se agrava con el paso del tiempo, porque cada vez el canal lleva más aguas sucias y pestilentes, anotó la señora Rosa, de la mesa directiva de la colonia Lucio Cabañas.
En su trayecto, el canal cruza la avenida Las Palmas para inyectar sus aguas hediondas al río Balsas, pasando detrás del salón de eventos Santa Clara, propiedad de la alcaldesa Itzé Camacho Zapiain, aunque antes “regala sus olores” a tres planteles educativos: la primaria Mártires de la Revolución, el preescolar Ovidio Decroly y el CEBA Luis Donaldo Colosio.
Los quejosos reportan que muchos años atrás, en tiempos de secas, servía el canal para “hacer cascarita” y jugar futbol y volibol dentro, pero hace unos diez años empezó a llevar aguas pestilentes de las que lamentablemente suma una porción el Comité de Agua Potable y Alcantarillado de Lázaro Cárdenas (Capalac), con ollas de aguas residuales.
Urgieron a atender el foco de contaminación y que la autoridad municipal intervenga, además que la Secretaría de Salud, a través de la Jurisdicción Sanitaria, actúe para evitar mayores daños a la salud pública.
Consultado rápidamente, el Visitador Regional de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, Leopoldo Ramírez Cornejo, dijo que el medio ambiente sano es un derecho ciudadano, por lo que se admiten quejas para actuar.
Son nuestra competencia, dijo, y se levantan quejas a petición de parte, que es cuando los ciudadanos acuden a la CEDH, o por oficio, que ocurre cuando se hace difusión de la molestia en los medios de comunicación.
Las presuntas violaciones a los derechos humanos por un medio ambiente que amenace la salud, llevan a que se solicite a la autoridad correspondiente rinda un informe de la situación y se busque restituir el derecho a través de medidas cautelares, indicó.
Cabe indicar que este mismo caso se denunció en marzo de 2019 a este medio de comunicación por tres de las colonias afectadas, la queja la encabezó el entonces regidor municipal Margarito Ortiz Vargas, y la situación, afirman, en lugar de resolverse, se ha agravado.
