Otitis media aguda

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Por Dr. Manuel Portillo Serrano

Gastroendoscopía/Gastrocirugía

 

Para fines prácticos en la consulta se abrevia OMA, que se refiere a cierta cantidad de líquido purulento, seroso, en el interior del oído medio, que ejerce que la membrana timpánica sufra una efusión hacia afuera, vista con el otoscopio abombada y es acompañada de síntomas claros de inflamación en la zona del oído afectado como son dolor en el sitio del oído inflamado, fiebre y datos francos de irritabilidad por el desasosiego que causa el dolor del oído, y al perforarse la membrana timpánica se presenta un signo que es patognomónico (característico) de esta enfermedad, que es la otorrea, salida de material purulento a través del oído afectado, con perforación y disminución del abombamiento de la membrana timpánica afectada.

Las Faringoamigdalitis no bien tratadas son la principal causa de que haya infección en el oído, por contigüidad, a través de la trompa de Eustaquio, que comunica la faringe con el oído y al haber cambios de presión, las secreciones de la faringe contaminadas se pasan al oído medio, siendo estas dos las causas más comunes de consulta pediátrica en época de frio, y se debe establecer muy bien el diagnóstico para poder instaurar el tratamiento adecuado para erradicar la infección y recuperar la membrana timpánica lo antes posible con objeto de evitar complicaciones en la función auditiva que dejen secuelas permanentes y graves, y realizar el aseo adecuado del oído medio, que debo recordarle, querido lector, es donde se ubica el sistema de transmisión del sonido hacia el cerebro, y al estar afectado el sonido no pasará por ese oído, dejando como secuela una hipoacusia baja del oído o definitiva sordera de ese lado.

Si se lo platico así, se ve que es un diagnóstico relativamente sencillo, pero qué cree, que en la práctica diaria, en todos los niveles médicos tanto institucionales como privados, existe un exagerado diagnóstico y estadísticamente se diagnostica de más, sobre todo en el área de medicina general y pediatría, y al especialista, que es el otorrinolaringólogo, pocos casos le llegan, solo manejará los ya complicados o los que han sido resistentes a los manejos médicos anteriores.

Los agentes pueden ser principalmente bacterias, ya que es la secreción purulenta; ahí es donde el estreptococo pneumonie está en primer lugar, en segundo lugar la H influenzae, seguido de estafilococo y otro tipo de bacterias, pero conociendo los agentes causales podremos iniciar su tratamiento adecuadamente.

En base a los hallazgos no solo se le darán los antibióticos que hoy por hoy, la penicilina y los betalactámicos, son los de primera elección, aunque ya exista mucha resistencia bacteriana, de aquí que debemos usar el que reporte un cultivo del exudado de la secreción del oído, y que se le haya realizado un antibiograma.

Hay que recordar que para realizar un cultivo debe de estar 5 días sin medicamento antibiótico.

Se les da antinflamatorios no esteroideos con el objeto de facilitar la entrada y el uso de los antibióticos, asimismo se le debe administrar analgésicos ya que el dolor del oído es sumamente intenso y muy doloroso.

La OMA es muy común, pero por lo mismo común se ha hecho como algo muy natural, y se oye con una frialdad decir a la madre: “no pasa nada, se infectó y se le reventó el oído”, esta aseveración es muy delicada, ya que estamos hablando que un niño puede quedar sordo solo porque no tuvimos el cuidado adecuado de atenderlo de una infección en la garganta sencilla llamada faringoamigdalitis, y que desgraciadamente al ser mal manejada se complicó con una Otitis Media Aguda, que si no es tratada adecuadamente dejará a ese pacientito con un déficit en su audición o bien lo podrá dejar sordo.

Por favor, no menosprecie estos diagnósticos, es en su hijo donde se está presentando y puede llegar a tener problemas auditivos permanentes si no somos lo suficientemente cuidadoso para tratar una otitis media aguda.

Gracias por leer este artículo.