Por Rafael Rivera Millán
Luego de la gran derrota que el Partido de la Revolución Democrática tuvo en los pasados comicios del primero de junio, no solamente aquí sino a nivel nacional, y luego de que en el caso de Michoacán ya estén funcionando las nuevas autoridades municipales, donde en muchos casos como en Lázaro Cárdenas el Sol Azteca volverá a ser oposición, los perredistas dijo en entrevista Marvin Toledo, Secretario de Asuntos Municipales del CDE del PRD, se han dedicado a hacer un auto análisis, olvidándose de tribus o prácticas sectarias, para buscar la unidad y retomar el rumbo.
El ex funcionario municipal dijo que se ha estado platicando ya con los 113 comités municipales, donde el comité estatal ha estado delineando una ruta política, realizando los diagnósticos en esos municipios, con el objeto de detectar cuáles son las principales necesidades y los “focos rojos” que existen, para de ahí comenzar a reconstruir los comités respectivos.
Sin embargo señaló que en el caso de Lázaro Cárdenas, la dirigente sigue siendo Araceli Mata, con quien ayer iba a sostener un diálogo para delinear una ruta en la que se pueda entrar, no propiamente de renovación, sino para que continué al frente del partido.
No obstante aclaró que a nivel nacional se ha estado manejando la posibilidad de un proceso interno por ahí del mes de febrero o marzo para renovar todas las dirigencias, “pero nosotros más allá de la posición del comité nacional o estatal, le apostamos al trabajo y a la organización con la militancia”, puntualizó.
Ya que dijo, en estos diagnósticos que se han hecho, se ha podido detectar cuáles han sido las fortalezas y debilidades, y que en función de eso se está trabajando con todos los actores del municipio y del estado, con el ánimo de cerrar filas, “porque el partido requiere de mucha unidad y mucho oficio político, estamos dejando a tras las prácticas de tribus y sectarismos, que en muchos estados y en particular en Michoacán nos hizo mucho daño en los pasados comicios”, recalcó.
En ese sentido concluyó diciendo que tras haber entrado en un proceso de catarsis, en el que han analizado sus errores, están en la ruta de la reconstrucción, por lo que si es en octubre, diciembre, febrero o marzo cuando se tengan que dar los relevos en las dirigencias locales, estatal y nacional, bienvenida la oxigenación del partido, “pero los perredistas hemos estado trabajando ya con organización y mucha unidad”.
