Por Francisco Rivera Cruz
Hay una asociación entre tomar y pasarla bien que erróneamente se ha adoptado la cultura de que si no hay alcohol no hay diversión, expuso Jésica Parra Mendoza, Directora de la Unidad de Especialidad Médica – Centro de Atención Primaria en Adicciones (UNEME CAPA), al exponer el punto de vista médico en el arranque de las actividades de la 24 Semana Nacional Sobre Alcoholismo Compartiendo Esfuerzos de la Central Mexicana de Alcohólicos Anónimos.
Al explicar que cada órgano del cuerpo se trastoca con la ingesta y con el abuso del alcohol, estableció que si para algunos padres es normal y sano tomar en el partido de futbol o mandar a los hijos a comprarles su bebida, se tendrá una cultura “corregida y aumentada” en el consumo de alcohol.
El problema es que los hijos se vuelven precoces e inician el consumo antes que sus padres, y la ciencia desde el punto médico y científico, refiere que un cerebro en desarrollo es más difícil que abandone el gusto por las sustancias a que se le acostumbre, abundó Parra Mendoza.
El alcoholismo se convierte en padecimiento crónico, degenerativo y gradual, porque el organismo humano a través de los neurotransmisores responde mejor a los estímulos externos, que a los que provoca o provocaría el propio cuerpo, abundó.
Dijo que incluso, al avanzar la enfermedad, se pierde feminidad de ellas y masculinidad en el varón, lo cual es un síndrome muy estudiado, y que tiene que ver con que el hígado se encarga de metabolizar el alcohol en lugar de hacer sus procesos naturales.
Durante el programa, desarrollado en la Unidad Deportiva Municipal la mañana de este lunes, se dieron testimonios de enfermos de alcoholismo y un mensaje central, en el que se invitó a tomar control en la forma de tomar o de otro modo acercarse a los grupos de AA.
En la presente semana, en las unidades médicas de la región se darán pláticas breves y regalará folletería de los programas de Alcohólicos Anónimos, quienes así honran la memoria de su fundador Bill W, en su 48 aniversario luctuoso.
