Deseable que no se olvide la cultura con la Zona Económica: Luis Sosa

0
816
Para el cineasta Luis Armando Sosa, la cultura no debe de dejarse de lado de la ZEE.

Por Francisco Rivera Cruz

En algunas urbes, como la de Monterrey, la industrialización absorbió otras expresiones, como la cultural, al punto que tienen uno de los más importantes festivales de cine en México, y no lo sabe la mayoría de los regios; es plausible que a esta región de Lázaro Cárdenas se esté considerando un proyecto económico de valía, pero ojala la Zona Económica Especial permita programas paralelos, dijo el cineasta Luis Armando Sosa.

Lázaro Cárdenas debería tener un crecimiento cultural y cinematográfico competente, comenta el también comunicólogo, para quien hay talento aquí, falta que las autoridades quieran trabajar con ellos.

Al ponderar la necesidad de dejar de poner a la cultura como un espacio donde se va a ver y se asuma también como una convivencia, se pronuncia porque con los proyectos industriales se considere también la pertinencia de impulsar las artes y la cultura.

Luis Sosa, comenta que de momento todas las grandes empresas de la región no parece importarles aportar a las expresiones culturales, porque algunas a las que se ha hecho alguna solicitud, ni siquiera contestan los correos electrónicos “y sí ubican mi trabajo porque algunos directivos en encuentros hablan de mis proyectos en cine”.

De trayectoria rápida porque en un par de años ya ha estado en eventos y festivales del séptimo arte en Morelia, Guadalajara, Monterrey, Francia, Colombia y otros, dice que hasta esta entrevista se percata que cada evento es diferente y hasta específico, pudiendo acceder al haber trabajado varios géneros.

Su cortometraje de “El perro amarrado” fue netamente experimental, por eso sólo quedó en Morelia; “El niño y el papalote” de corte narrativo, por eso no llegó a distintos festivales en México, pero tuvo una gran aceptación en Francia y Colombia.

“Valentón” por ser documental, lo acogieron en varios festivales con temática social y “Sin deseo de indecencia” con temática LGBT, fue otra propuesta.

Al compartir que su último proyecto ha sido “Cuando se mete el sol”, comenta que es muy social y hace abordaje de una situación especial que está sucediendo en México: Desaparecidos, feminicidios, balaceras y los ingreso de fuerzas armadas a centros escolares, siendo sin embargo el centro del trabajo no la violencia sino la pulsión de vida.

“Me ocupo de quienes no esperaban acabar muertos. Pulsión de la vida, llamo a un nacer, pero cuya vida es tocada por la interrupción”, dice del proyecto apoyado por el Instituto Mexicano de Cine (Imcine).

El artista con un balón hace ejemplo, “…en el lanzamiento de esta pelota, hay una fuerza, un proyecto de vida, que aquí (más adelante) es interrumpido. Espero que se pueda entender. Que es muy actual, pero sin hablar de denuncia o violencia sino del deseo de vivir”.

Comparte también que entre febrero y marzo con National Geografic para a su siguiente propuesta, ya denominada “Hombres de sal”, con el que quiere rendir homenaje al sector origen de nuestra ciudad, el pesquero.

Señala que en tal documental hablará de la actividad pesquera ante los prejuicios sociales hacia los pescadores, en un deseo de fortalecer la identidad de comunidad dedicada a la pesca y humanizar su actividad, bajo estigmas, problemas e intereses de índole político, económico y social.

“Y es que los divide el desarrollo y son cinturón de pobreza, con sólo cruzar una calle; me interesa retratar esta dualidad que sólo una calle divida el desarrollo de nuestra comunidad”, dice el alusión a la fracción que pescadores ocupan en la margen derecha del Río Balsas.

La otra parte a mostrar en su cámara es la ecología, desaparición de especies, destrucción de ecosistema y contaminación en el mar, incluida la implicación de responsabilidad social que conlleva.

Luis Sosa, este año tiene en sus planes también seguir experimentado en el campo teatral, animado con los triunfos traídos del festival de Tacámbaro, y a la vez se prepara para instruir en guion cinematográfico, en un caso en la Biblioteca Álvaro Obregón del 4 al 15 de marzo y en el otro se pone de acuerdo con Concepción Talavera, directora del Centro Cultural La Parota, de La Mira.