Por Dr. Manuel Portillo Serrano
Gastroendoscopía/Gastrocirugía
Producto nuevo que salió este año al mercado, la lubiprostona, con nombre comercial Amitiza, con denominaciones de 8 y 24 mcg, presentación en cápsulas, lo lanza el laboratorio Takeda, laboratorio japonés, muy competente y se trata de un laboratorio ético.
Lo lanza con las indicaciones de uso en estreñimiento crónico, sobre todo el idiopático, que es aquel que desconocemos a qué se deba la constipación (estreñimiento) y que ya descartamos todas las causas posibles del estreñimiento, asimismo está indicado en el síndrome de intestino irritable en su modalidad de paciente con estreñimiento, y otra indicación que reportan, es en pacientes con estreñimiento ocasionado por opioides.
La lubiprostona no se absorbe y no pasa a vía sistémica, o sea pasa a la sangre, queda en el intestino haciendo su función, lo que le da un alto grado de seguridad, ya que su absorción es mínima, con una fijación más común en el área intestinal, recorriendo fácilmente todo el tubo digestivo desde el estómago hasta el yeyuno, y es fácilmente eliminada en la heces, no afecta en nada la absorción alimentaria, se puede usar con suma confianza en pacientes con insuficiencia hepática o renal, con mucha seguridad, ya que no se absorbe.
La función directa es aumentando el transporte del ion cloruro hacia la luz intestinal aumentando el líquido hacia el interior del intestino y esto mejora el tránsito intestinal.
Es un compuesto de los llamados prostonas, que es un activador en la acción local de los canales de cloruro, mejorando la secreción de fluidos intestinales, que van ricos en cloruros y líquidos, no alteran las cifras de sodio ni de potasio en el intestino.
Al aumentar la cantidad de líquido adentro de la luz intestinal, promueve el movimiento intestinal, facilitando el paso de las heces, y su acción es directa al epitelio gastrointestinal al activar los canales CIC-2 de este epitelio.
Se ha llamado estreñimiento crónico idiopático a menos de 3 evacuaciones intestinales espontáneas en una semana, con heces muy duras, así como presentar sensación de evacuación incompleta, con mucho esfuerzo para evacuar, llegando a presentar lesiones en área de recto y ano. Se demostró que al usar amitiza, los síntomas del estreñimiento mejoraban.
Uno de los grandes problemas a los que nos enfrentamos con pacientes que deben usar opioides, es la constante presencia de estreñimiento y en estos casos de difícil manejo, una muy buena opción es amitiza, la lubiprostona, favorece las evacuaciones semipastosas y con fluidez, pero requiere un tratamiento de mínimo 4 semanas, se han hecho estudios para verificar el funcionamiento intestinal después de un uso de opiáceos, de lo cual se desprende que la seguridad para el uso de este tipo de producto es bueno.
Otro padecimiento en que se puede utilizar este producto es en el SII, con su versión de tipo estreñimiento, mejorando mucho la sintomatología y mejor aún, la sintomatología dolorosa abdominal, la distención abdominal y los periodos de estreñimiento se ven muy disminuidos, de aquí que sea también muy seguro su uso en este tipo de pacientes.
Lo tenemos contra indicado en pacientes con obstrucción intestinal de cualquier tipo, o que se sepan alérgicos a la lubiprostona, no usarse durante el embarazo y no usarse en menores de 18 años. Como todos los medicamentos puede llegar a presentar ciertos datos de incomodidad como es náusea, diarrea, disnea o falta de aire que mejora al suspender el tratamiento, no se debe usar en pacientes con obstrucción u oclusión intestinal, algunos pacientes presentaron desmayo o hipotensión al administrarles amitiza.
Las reacciones adversas más comunes son náuseas, diarrea, dolor abdominal y flatulencia, distención abdominal, vómitos y una incomodidad abdominal. Ocasional dolor de cabeza y muy pocos casos de edema periférico.
Este tipo de análisis debemos hacer los médicos con los productos nuevos y ver los trabajos que se presentan hechos por el laboratorio, por eso creemos en laboratorios éticos, que hacen estudios en animales y en seres humanos antes de lanzar sus productos, y en base a ese análisis y verificación de datos, ahora sí podremos los médicos tenerlo en nuestra lista de productos para uso de los pacientes con toda la seguridad que es un estudio o son estudios totalmente éticos, que nos permiten decidir si lo podemos utilizar o no en nuestros pacientes, no se trata solo de escuchar que ya salió o que un representante médico nos lo presente, es el valor cívico y moral de estudiarlo y valorarlo para poder usarlo con seguridad y confianza en nuestros pacientes, este es el tipo de investigaciones que se ahorran los laboratorios que se dedican a copiar, a producir una copia de los productos, ya que se les terminó la patente, ese es el trabajo que se debe hacer para poder usarlo con humanos, y aquí se los ejemplifiqué con un producto completamente nuevo, ético y lanzado por un laboratorio totalmente de patente.
Gracias.