Por Francisco Rivera Cruz
“Es un robo, es un acto de corrupción”, enfatizó José de Jesús Camargo, integrante de la Organización Indígena y Popular Emiliano Zapata, para quien el cobro en el recibo de Capalac por concepto de saneamiento de aguas, debe cancelarse hasta que haya verdadero tratamiento a las aguas negras.
Cuestionó por qué no interviene la Comisión Nacional del Agua (Conagua) porque tiene también responsabilidad en lo que está haciendo el Capalac en contaminación de los mantos freáticos, el río Balsas y con ello mar, dijo.
“Es aberrante el robo que hace nuestra autoridad”, agregó aclarando que no se está en contra. “No estamos contra la administración sino de que no cumpla su obligación contraída con el pueblo”.
Explicó que preocupa la inacción gubernamental porque no sólo ocurre en calidad y cantidad de agua, y tratamiento de las aguas residuales, sino en otras áreas como alumbrado público “donde tenemos que comprar lámpara y balastras, o sea, también ahí, el gobierno municipal evade su responsabilidad”.
Las declaraciones ocurrieron en una conferencia de prensa a la que asistieron integrantes de varias organizaciones sociales que se quejan de que el gobierno de María Itzé Camacho evade atender sus demandas que se centran en los servicios en agua potable, drenaje y alumbrado.