Por Dr. Manuel Portillo Serrano
Gastroendoscopía/Gastrocirugía
Desde los griegos se acuñó este término, muy actual, usado por Esquilo en el año 467 AC, en su obra Los siete contra Tebas, en el caso de desobediencia de Antígona -al sepultar el cuerpo de su hermano y no seguir las indicaciones que le daba la ciudad o polis, que había ordenado que el cuerpo de su hermano sirviera de comida para los perros-.
Ese acto de desobediencia fue donde surgió el término anarquía, vemos que es derivado del griego. Anarquía es aquello desprovisto de director, sin normas, sin jerarquía, sin autoridad, sin gobierno; siendo esta la acepción más usada.
Se usa para simplificar el caos político, como forma de gobierno, y a todas aquellas personas o grupos sociales que antagonizan el orden, la paz y el buen comportamiento.
Muy de moda en la época actual en que se hacen manifestaciones de cualquier índole, y aparece un grupo de personas autodenominados anarquistas, y llevan dichas marchas a enfrentamientos, pintas y destrucciones, cuyo único fin es desestabilizar, separar y más aún crear caos, cuyo objetivo principal del anarquismo es ese generar caos en alguna estructura social o gubernamental establecida.
El símbolo del anarquismo es un círculo con una A mayúscula en el centro, de color negro, el anarquista considera que puede un grupo social vivir sin gobierno, viviendo en una sociedad políticamente organizada pero sin estado, en las épocas modernas podemos hablar de un neo anarquismo, que al leer las ideas expuestas por esta tendencia uno se asusta por lo débil, mediocre y sumamente superficial de las ideas expuestas. Y que son llevadas al grado de religión con tintes de sacrificio para defender ese neo anarquismo, retomando ideas y comportamiento que el anarquismo puro ya que hasta se ha desechado.
Incluso Luigi Fabbri, hace ya 50 años, lo llamó como influencias burguesas en el anarquismo.
El anarquismo actual, o neo anarquismo, proviene de intelectuales disidentes de clase media y clase media alta, estudiantes de colegios públicos, con alta dosis de resentimiento a una sociedad que no acaba de aceptarlos, incluye a grupos marginales que se basan en aspectos individualistas cuyo objetivo principal es escalar algún peldaño político, primero, pero lo hacen para ganar dinero y si es del erario público mejor, que le pague el pueblo, y como segundo objetivo debilitar al sistema, no importa qué tipo de sistema esté establecido en ese lugar, el chiste y objetivo principal es debilitarlo, basándose en una utopía de país y es pensando más por una clase no trabajadora.
Otra de las características del neo anarquismo moderno es el escapismo, si algún anarquista está en un grupo político y este es debilitado, se escapan de ese y se pasan al otro que está más fuerte en ese momento para seguir con su objetivo de obtener un beneficio.
Así, querido lector, aquellos Anarquistas antiguos idealizados, visionarios que anhelaban un pasado idílico son un mito, Woodcock dice: “El movimiento anarquista histórico que surgió de Bakunin y sus seguidores está muerto”, y con él los principios del anarquismo clásico, vemos ahora que esos grupos que se mezclan con aparentes grupos pacifistas enarbolando la bandera anarquista en realidad no lo son, y peor aún ni siquiera neo anarquistas, son agresores profesionales, porros y grupos que escudados bajo cualquier pretexto, aunque este sea justificado y bueno, saldrán a querer desprestigiar algún movimiento, y ya no se podrá llamar grupo anarquista, deberán ser llamados grupos provocadores, escudados en una bandera que no alcanzaron a entender, y que aquí lo interesante y más importante será saber quién ordena a esos grupúsculos pseudoanarquistas, mejor llamados así, a realizar pintas, agresiones, a golpear y a desencadenar o tratar de desencadenar caos.
Y lo peor, ya lo estamos viendo esto, lo vimos en las marchas feministas de la semana pasada en la CDMX.
Gracias.
