Por Francisco Rivera Cruz
El próximo domingo 27 de octubre, el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en este Distrito 01 de Michoacán, realizará –en lugar por definir– su convención para elegir a sus delegados distritales, sin embargo hay acusaciones de juego “peligrosamente sucio” y con “prácticas del pasado”.
“Triquiñuelas que se empiezan a usar, adelantan broncas, ojala y no se llegue a confrontación, pero no hay juego limpio y ese es un signo inequívoco de choque”, advirtieron morenistas.
Están aplicando las misma mañas que le criticamos a otros partidos, y eso que las reglas les recomienda a funcionarios de cualquier nivel no operar por candidato alguno, y que regidores, diputados, alcaldes y demás garanticen “suelo parejo”, expusieron.
La queja inicia en un desaseo de padrones. Por ejemplo, de la noche a la mañana tenemos en Morena de compañeros de partido a gente como Alfredo Rico Badillo, que en las últimas elecciones peleó en el PT, o a los perredistas Manuel Santamaría y Francisco Javier García Navarrete, observan.
Entre las inconformidades mencionan que abiertamente se está apoyando a ciertos personajes, y para eso, hay personal pagado por algunos servidores públicos, “tal vez también pagando del erario público”, eso de momento “no lo podemos asegurar o negar”.
Expresan que les inquieta la convención luego que el pasado domingo se vivieron accidentados procesos en varios puntos del país, y se tuvieron que cancelar alrededor de 20 asambleas de Morena en los que se elegía a delegados distritales.
Anomalías en las urnas, trifulcas, agresiones verbales y físicas, sellaron las convenciones de Mexicali, en sus distritos 01, 02 y 07, donde ante la situación ríspida, los enviados del Comité Nacional de Morena, decidieron suspender las asambleas. El mismo escenario se dio en Tijuana, por lo que ve a los Distritos 04, 05, 06 y 08, y en Zacatecas se suspendieron tres de los cinco procesos.
Guanajuato, San Luis Potosí y Coahuila, las asambleas fueron en medio de acusaciones de coacción al voto, embarazo de urnas, y algunas robadas después de la votación. Mientras en Guadalajara, gente armada y encapuchada ingresó al recinto de la asamblea para robarse el equipo de cómputo donde se registraba votación.
“Ese marco no es para que nos orgullezca como Morena, pero el problema es que vamos al mismo derrotero, ante lo cual se ocupa más oficio, más interés general en el partido y no en grupo o personaje”, cerraron quienes pidieron mantenerse en anonimato aunque sus declaraciones las dieron en lugar muy público.
