Por Rafael Rivera Millán
Mientras que el gobierno del estado anunció que Alberto Frutis Solís, quien se venía desempeñando como titular de la Secretaría de Educación en el Estado, dejaba de serlo a partir de ayer lunes para incorporarse como Asesor del gobernador Silvano Aureoles Conejo y en su lugar se designaba a Héctor Ayala Morales, como Subsecretario de Educación Media Superior y Superior, y a la vez encargado del despacho de la SEE, con la finalidad de continuar el trabajo conjunto con la federación para concluir el proceso de federalización de la nómina magisterial de Michoacán, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, anunció su satisfacción porque en su concepto terminaba una etapa más difícil para el magisterio michoacano.
Mediante un boletín de prensa, la CNTE calificó a Frutis Solís de impositivo, por su mala administración y falta de tacto político, y que por eso se ganó el repudio del magisterio michoacano, y el desconocimiento de la Sección XVIII de la CNTE, en varias partes de la geografía estatal fue repudiado, como en Maravatío donde fue corrido a huevazos.
Fue señalado también de vengativo, porque suspendió el pago de manera arbitraria a varios maestros, solo por el hecho de ser críticos de sus políticas educativas, entre ellos a Isidoro Castañeda Navarrete, quien forma parte de la dirigencia regional de ese gremio en esta zona de la costa, quien señalan, padeció la suspensión de su salario por cuatro quincenas.
Ni el desconocimiento de la Sección XVIII, ni un mes de toma de vías en el mes de enero, pudo remover del cargo a Frutis Solís, tuvieron que venir las auditorias federales, que arrojaron 16 mil irregularidades, entre las que están: plazas duplicadas, venta de plazas, y un sin fin de anomalías más, para que este político de extracción perredista, pidiera: “permiso de atender asuntos personales”, señala el comunicado de la CNTE.
