* El ex alcalde estuvo anoche en el noticiero de este diario, donde habló de su experiencia como primera autoridad municipal y de las actividades a las que está dedicado.
Por Francisco Rivera Cruz
En lugar de discutir, se debe buscar solución, alternativas y hacer gestión, consideró Mariano Ortega Sánchez, al pedirle opinión sobre el pleito entre alcalde y síndico; y compartió también que no le ve futuro a la municipalización de Las Guacamayas, además expresó preocupación por la contaminación al río Balsas, y de política, dijo que esperará que se despejen los nubarrones para decidir si participa o no buscando ser candidato.
El exalcalde, empresario de los ramos del transporte, turístico y construcción, entrevistado anoche en el Noticiario de Gente del Balsas, a la pregunta de cómo se llevó con el Síndico, presumió un compacto equipo y de respeto.
Ni con el síndico Abel Salazar, ni regidores tuvo algún problema, pues los tomaba en cuenta y exponía situaciones, porque “lo que no puede ver uno, lo ve otro”, además que el síndico tiene atribuciones establecidas en la Ley Orgánica Municipal y llega por elección popular.
Dado que el Ayuntamiento tiene que dar servicios y atender necesidades, se deben buscar alternativas y hacer mancuerna, además que a la sociedad le va bien si en lugar de discutir se busca solución y alternativas y en lugar de gastar el tiempo en pleito se emplea en gestiones, comentó.
En el caso del distribuidor vial, y ante el trascendido que una empresa ha presentado recurso de inconformidad, sugirió a la firma insatisfecha de preferencia retractarse para no dar motivo de atraso a la obra que tiene un paquete de inversión no despreciable de 500 millones, que ya quisiera cualquier otra ciudad.
Del boulevard playero, que recordó tomó como propio en su administración ya que el gobierno estatal lo dejó a la deriva, lamentó el descuido actual y poco valor que se le otorga al hecho de tener una obra de 13 kilómetros a la orilla del mar.
La inoperatividad de las plantas de tratamiento de aguas residuales tiene al río Balsas con grave contaminación lo mismo que los esteros, y sin embargo hay fondos y recursos en organismos internacionales como el Banco Mundial, sólo es cuestión de tener proyecto técnico.
Las tratadoras son muy viejas que gastan mucha energía, pero hay nuevas tecnologías, y mientras las plantas de Las Guacamayas, Playa Azul y Buenos Aires están paradas haciendo un serio problema, señaló que no se ha avanzado en el proyecto que se armó con ArcelorMittal para venderle agua saneada.
Sobre el tema de las áreas verdes, Mariano Ortega reconoció que le cuestionaron mucho y sin embargo, no se distingue entre un área verde y un área de donación, y en el caso de éstas últimas en cada fraccionamiento o colonia se considera y las que son para el Municipio éste determina su uso.
Detalló que aunque la enajenación no fue privativa de su administración, la Secretaría de Finanzas del gobierno estatal sugirió realizar venta para enfrentar deuda a proveedores que se había recibido como herencia de los gobiernos anteriores.
Para el tema, se formó una comisión de regidores que analizaron y aprobaron, e incluso un notario hizo reglas y las cuidó. “Me siento bien en ese aspecto, no se hicieron cosas indebidas, están los ingreso. Me tocó la bolita porque era jefe, pero lo hicimos dentro del marco de ley”, justificó.
Sobre el tiempo que se le restó a su administración, con el llamado michoacanazo, al que se refirió como “la escuelita”, lamentó no dejar un buen legado, y expuso que soñaba con que se hiciera el distribuidor vial que ahora se construye, que el Malecón continuara en la zona que incluye un mercado de marisco, un muelle para lanchas y restaurantes, con obtener recursos para el puente suspendido de acceso al boulevard, que al no requerir más de 30 millones de pesos y por su prioridad para el turismo, bien pudiera terminar Silvano Aureoles, y así “deje huella en Lázaro Cárdenas”.
Pedida una opinión sobre el actual Gobierno Municipal morenista, se dijo respetuoso, porque cada quien tiene su forma de gobernar y dado que los buenos gobiernos se demuestran con buenas acciones, calificar le corresponde a la ciudadanía.
En el tema de la propuesta de convertir municipio a Las Guacamayas, estimó que no tiene condiciones, pues está integrado de puros asentamientos irregulares que no están pagando predial. Recordó que una administración municipal vive de impuestos porque lo que otorga el gobierno federal es muy poco, “y ahí está el detalle”.
El empresario que no se reafilió al PRD, interrogado si buscará ser candidato en 2021, manifestó que la decisión será cuando empiecen a esclarecer los nubarrones, ya que como lo decía el extinto Francisco Bautista “la política al que no lo mata, lo deja picado”.
Regresando a la ciudad y el municipio, dijo que le hace falta mucho, no tiene recinto ferial, central de autobuses, ni mayor infraestructura turística, y sin embargo por sus interesantes ingreso a la hacienda federal, tiene su alcalde un peso que hace falta ejerza para atraer recursos que concreten los servicios que se ocupan.
“No se puede desarrollar solo el Puerto, también la ciudad pues genera necesidades y los trabadores (portuarios) son de la ciudad”, acotó en ese tema Ortega Sánchez.
