* Hoteleros y demás prestadores de servicios de* la costa del municipio de LC, dicen, están pasando una crisis económica impresionando por lo del COVID-19
Por Rafael Rivera Millán
La temporada vacacional de Semana Santa, considerada el “pulmón” económico de los prestadores de servicios turísticos, de un plumazo lo ha derrumbado el COVID-19, señaló el doctor Ramón López Pedraza, ex delegado estatal de turismo en esta región, y actualmente uno de los impulsores de una asociación de prestadores de servicios turísticos que va de Chuquiapan a Caleta de Campos.
A su vez, Julián Navarro Piñal, del Hotel Park Tour Caleta, ubicado en Caleta de Campos, señaló que los prestadores de servicios turísticos como él, están viviendo una crisis económica impresionando, pues tienen todos sus establecimientos cerrados y al igual que las playas en esta temporada vacacional de Semana Santa, las playas también están vacías, por lo que ya esta temporada buena se ha perdido y en ese paso va la de Verano, por lo que la esperanza es que la pandemia pase lo más rápido posible para recuperarse un poco en las vacaciones de fin de año.
En entrevistas telefónicas por separado, el doctor López Pedraza indicó que se está pasando como todos, pero sobre todo los prestadores de servicios que viven de la movilidad del turista, una situación económica muy difícil, ya que aunque los paseantes están queriendo llegar a Caleta o a algún otro lugar de la costa michoacana, por tener ya programado con antelación sus vacaciones o de recreación en esta Semana Mayor, pues se ha estado cancelando o reprogramando su llegada.
“Es una gran incertidumbre la que se está viviendo, ya que sólo a las personas que llegaron antes de la contingencia sanitaria se les recibió, pero a medida que va venciendo su reservación, van saliendo y no se está recibiendo a nadie más”, puntualizó.
“Semana Santa siempre ha sido el pulmón económico más importante en la región, porque nos reactiva para poder el tema de la temporada baja, porque hay que pagar empleados haya o no haya gente. La temporada que sigue es baja, pero siempre hay que tener personal para tener los establecimientos en óptimas condiciones para brindarles un buen servicio. Ya sólo nos queda esperar que esto pase rápido y que nos vaya bien en la temporada vacacional de diciembre, para recuperarnos un poco”, indicó.
Para Julián Navarro, todavía falta pasar lo más complicado y que está por venir. “Esto está más complicado de lo que se ve, no es tan fácil, y aparte pasando el riesgo del contagio viene lo más fuerte que es la economía que a todos nos va a pegar, no va a ser fácil salir, esto va tardar unos meses más para que empiece a repuntar”.
Prácticamente dijo, se ha perdido la temporada vacacional de Semana Santa 2020, y la de las vacaciones escolares de julio y agosto también, y luego viene septiembre con las lluvias, por lo que si algo se espera de recuperación para el sector, esto vendrá a finales de año, puntualizó.
La esperanza añadió, es la temporada de invierno 2020-2021, “si ya todo se acomoda un poco, para comenzar otra vea de nuevo, pero así como vemos las cosas, vemos muy complicado este año, quizás a principios del próximo las cosas tomen otro giro”, expresó el hotelero al señalar que no solo se ve difícil el panorama para toda la población y sobre todo para los prestadores de servicios, que viven del turismo y si no hay paseantes no son nada.
Indicó que los apoyos anunciados por el gobierno estatal, sobre el subsidio al impuesto sobre nómina, no les cubre mayor cosa, lo fuerte son los gastos para el pago de personal, para tener gente para el mantenimiento de los establecimientos para que estén en buenas condiciones todos los negocios para cuando se reanude la actividad.
Envió finalmente un mensaje de que todos pongan mucha atención en lo que está pasando, que hagan conciencia, pues mientras más se haga caso de no salir a la calle, más rápido saldremos de la pandemia, pero si es al contrario y la gente no entiende, vamos a demorar mucho tiempo más en recuperarnos, finalizó.
