Por Francisco Rivera Cruz
Marchando por una hora y bajo la lluvia, la tarde de ayer lunes un grupo de ciudadanos demandó justicia en el caso del homicidio de Enrique Sánchez, que fuera baterista del Grupo Corazones del Amor, y que la policía haga su trabajo de investigación sin exigir suma alguna porque salario ya tiene “y no la responsabilidad de dar resultados”.
La marcha salió de la casa de la familia Sánchez Brizuela haciendo recorrido por la calle Reforma para llegar a la venida Lázaro Cárdenas hasta Palacio Municipal, donde hubo un mensaje en rechazo a la autoridad municipal, que deja a los ciudadanos solos en sus dolencias y cuando son víctimas de algún delito, “en lugar de acompañarnos y darnos resultados, anda pensando en a qué puesto brincarle”, se aseguró.
Ahí, se coreó un “justicia, justicia, justicia”, mientras el orador, un ex sindicalista y representante del gremio taxista, en el que también se desempeñaba el extinto Enrique Sánchez, lamentaba: El dolor del pueblo les vale madre y hasta nos hacen creer que están de acuerdo con la violencia.
Minutos después, frente a la Fiscalía Regional, el contingente volvió a exclamar, justicia, y el mensaje fue que: Aquí en la Fiscalía, en lugar de hacer su trabajo piden dinero para poder moverse, siendo que para eso les pagan con nuestros impuestos. “No es posible que esto parezca un mercado, donde nos roban nuestras pertenencias ya que para que puedan dar seguimiento (a las investigaciones) necesitan que se les dé dinero”.
Por esa razón –prosiguió– les estamos diciendo que ya basta. Que el personal de la Fiscalía haga el trabajo como le corresponde para esclarecer los hechos de violencia.
De paso, el declarante dijo que la alcaldesa debería acompañar las demandas del pueblo, así que a Itzé Camacho le mencionaron con un “si no puede con el encargo que se haga a un lado”.
La manifestación, que empezó a las 6:30 de tarde, se dio por concluida prácticamente a las 7:30, estando al frente Enrique Sánchez, padre del músico y taxista que fuera privado de la vida el pasado 8 de octubre, en la zona del viejo malecón de la ciudad, lugar para el que se exigió presencia policial y sacarlo del descuido en que se le ha dejado caer por el gobierno.
En la marcha, que condujo el catedrático y músico Jaime López, se dejaron ver el exregidor priista Fernando Diego, el actual regidor petista Jesús Mayoral y el exdirigente sindical de la desaparecida NKS, Francisco Vargas.
