Por Francisco Rivera Cruz
En el presente tiempo de la pandemia, con el objetivo claro de tratar de divertir sanamente y ponerle desde la escena, bálsamo a la situación de estrés que el nuevo virus deja en la salud y economía, se gestó “Los Monólogos del pene”.
Aborda temas tabú que al final del día no lo son del todo, porque si bien sexualidad, misoginia, machismo, inseguridad y violencia, tendrían relación directa al género masculino, terminan abrazando a la sociedad toda.
Apostando al talento nuevo de Lázaro Cárdenas, el productor teatral Lorenzo Rosales, pone frente al escrutinio público a Javier Tapia, Shamir Rosales, Alaín Sonora y Elías Galeana, con una obra para reír y a la vez reflexionar.
Que los actores, a excepción de Shamir, se vayan a enfrentar por vez primera al respetable y que sean salidos de profesiones y campos diferentes, es lo interesante, como el hecho de que lleven de sus ámbitos diálogos que hacen las piezas del rompecabezas.
La propuesta de dar voz al “distinguido miembro”, es porque “si la vagina habla, el pene también”, donde se puede motivar la risa o carcajada, encontrando que “eso le pasó al amigo de mi primo” y reflexionar sobre conductas y herencias en temas de sexualidad.
Los componentes son un conjunto de monólogos sobre las etapas de la vida del hombre: gestación, niñez, “pérdida de inocencia”, matrimonio, amigos y sociedad, vejez e impotencia, el peso mental en la importancia del tamaño, entre otros.
La propuesta de Rosales de los Santos es realizar una temporada aquí, misma que empieza –con todos los protocolos sanitarios– este sábado 31 de octubre, al filo de las 8:30 de la noche, en un salón del Hotel Sol del Pacífico.
Ahí durante dos horas, hablará “el más cercano amigo del hombre”, aunque Lorenzo Rosales prefiere decir que se escuchará “lo que callamos los hombres”.
El productor, próximo a cumplir 30 años en las artes y 18 de que pusiera en escena pública su primera obra teatral, ha dirigido Los monólogos de la vagina, Cabaret, Por qué los hombres aman a las cabronas, y Los hombres son de Marte y las mujeres de Venus, entre otras.
