Por Rafael Rivera Millán
“Al incendiarse de nuevo el basurero municipal, ahorita le tenemos más miedo a la contaminación que está generando y que nos puede matar más rápido que la misma pandemia del COVID-19, por evo vamos a ver qué acciones tomamos entre las autoridades ejidales y la población en general de San Juan Bosco, El Reino y otros lugares más. No tenemos nada en contra de nadie, pero no nos dejan otra salida”.
Lo anterior fue expresado la tarde de ayer martes por Camerino Jaimes Cortés, ex presidente del Comisariado Ejidal de San Juan Bosco y uno de los campesinos productores de ganado y granos más afectados en sus animales y parcelas, por la gran contaminación ambiental y daños a sus terrenos agrícolas que ha estado generando la operación del mal llamado relleno sanitario municipal, ubicado en esa demarcación.
Indicó que no era posible que luego del incendio ocurrido el año pasado y que ayer martes volvió a ocurrir en gran magnitud, al grado de que las brigadas de bomberos ya no podían hacer nada, porque al subir el calor el incendio se volvió incontrolable y tiene tapado de humo a muchas comunidades aledañas, provocado además, por la falta de acciones de la actual administración municipal que en lugar de rehabilitar la cerca perimetral del basurero, con sus propias máquinas rompió las cercas para ir en busca de tierra para tapar la basura, pero ya el ganado se metió al relleno y al comer bolsas de plástico y otros productos tóxicos, se ha estado muriendo.
Ante la falta de una estrategia del gobierno municipal para evitar que su ganado y tierras agrícolas sigan sufriendo daños, y que la misma población ahora se muera más por la contaminación que por la pandemia del COVID-19, dijo que los habitantes de la región, además de estar reiterando su exigencia de que el mal llamado relleno sanitario sea clausurado, de no ser así, van a retomar la idea de bloquear el acceso a los camiones de limpia, que tenían pensado hacer el año pasado, pero por la cuestión de la pandemia se detuvieron, pero ahora no, recalcó.
La situación del incendio del basurero afirmó, se ha vuelto algo horrible y catastrófico. “No sabemos qué hacer ya, y ni modo que ahora pretendan acusarnos nuevamente de que nosotros somos los que le prendemos fuego a la basura_”.
Otra situación que debe llamar la atención de la autoridad municipal, es que los pepenadores del basurero están arriesgando su vida, al tratar de rescata el material que ya tenían separado para venderlo, y aun con el riesgo que ello implica, se están metiendo entre las llamas para rescatar lo que puedan, y ninguna autoridad ha estado presente para evitar un problema mayor que pueda venir por esta situación.
Se quedó de que luego de las denuncias que han venido haciendo, la Procuraduría del Medio Ambiente de Michoacán el año pasado haya solo enviado a unos inspectores, pero no les avisaron para que los campesinos y pobladores les mostraran los daños que han sufrido, para luego sacar una nota que el relleno cumplía con la normatividad. “Yo no quiero hablar del Procurador Ambiental, porque a lo mejor no lo sabe, pero a mí me huele a que por ahí les dieron para los refrescos y dejaron las cosas que siguieran igual, pues hasta la fecha no hemos sabido de sanciones”, puntualizó.
