Entre insultos y acusaciones aprueban la Cuenta Pública reprobada en marzo pasado

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Muy ríspidas fueron las dos sesiones extraordinarias de cabildo del día de ayer. (Foto: Kike Rivera).

Por Francisco Rivera Cruz

En un par de sesiones extraordinarias, fue revocado el acuerdo sobre la Cuenta Pública 2020 que el 5 de marzo tuvo reprobación mayoritaria y el 14 de abril se intentó aprobar terminando entonces en denuncias penales por amenazas telefónicas.

Esta vez, parecía que las sesiones serían sin problemas ya que el cuerpo colegiado del Cabildo estaba sensibilizado de que en su voto estaba una responsabilidad, sin embargo el calor de argumentos subió, y mientras para el regidor Margarito Vargas fue dar “espectáculo”, para la regidora Minerva Vázquez era como estar en el tianguis.

Y es que se llegó a las descalificaciones entre los regidores morenistas y de las alusiones personales se pasó a los señalamientos directos, luego a acusar y denostar mientras se trataba de argumentar razones de estar a favor y en contra de la aprobación a la Cuenta Pública.

Los regidores Rosana Alonso y Felimón Acosta, encararon los argumentos de su compañero Mario Adrián Pérez y del síndico Miguel Ángel Peraldí, y así subió el tono de las posturas.

Beneficiarios de la información, levanta mano, arrastradito, que pone la ley a sus intereses y desinformados, fueron parte de las acusaciones escuchadas y que detonaron tras que Pérez Ibarra dijo hacia la regidora Alonso Flores que confundía las peras con las manzanas, ante el hecho de que ella dijera que era lo mismo aprobar los informes trimestrales que el anual.

La regidora Bertha Alicia García Rico, manifestó que si bastara con la cuenta trimestral qué razón tendría la cuenta anual, y precisó que alguna cuenta del periodo corto la reprobó porque no le fueron aclaradas las dudas y en otras se ausentó para evitarse las represalias que de todos modos ocurrieron porque le quitaron todo su personal y todavía le quisieron exigir firmar por gastos de comisión y otro tipo, cuyos recursos nunca vio.

En su momento, Pérez Ibarra argumentó que lo que se perseguía era limpiar la imagen del ex tesorero municipal que tenía reprobada una cuenta anual, y entregó un documento de 22 hojas en las que argumentó su oposición tanto a que se revocara el acuerdo 032 SC07/2021, del 5 de marzo de este año, como a que se aprobara la Cuenta 2020.

Cuando se estaba en las acusaciones directas, que tuvo que solicitar el secretario municipal Horacio Ramírez las superaran, la regidora Minerva Vázquez intervino para señalar que parecía que estaban en un tianguis y solicitó dejar “de estarnos sacando los trapitos”, causando sorpresa de un par de sus compañeros que observaron que ella nunca toma la palabra.

Así se llegó a la votación en la cual, ocho de los once integrantes del órgano de gobierno aprobaron la Cuenta Pública, a la vez que la rechazaron Mario Adrián Pérez, Bertha Alicia García y el síndico Peraldí Sotelo.

La aprobación ocurrió por Minerva Vázquez, Felimón Acosta, Margarito Vargas, Rosana Alonso, Jesús Mayoral, Francisca Chan Panti y José Ángel Polanco, además de la presidente municipal María Itzé Camacho. Estando ausentes Zulma Nayeli Tovar, Oscar Daniel de la Peña Carmona y Lorena García Posada.