Por Francisco Rivera Cruz
Trabajando en el propósito por ser reinstalados, el grupo de rescindidos por ArcelorMittal ha recurrido al comité nacional del sindicato minero que conduce Napoleón Gómez Urrutia, al que ha hecho llegar un documento de solicitud para apoyo legal y económico.
Así lo dieron a conocer, precisando que han sostenido pláticas con delegado especial para Michoacán del Sindicato Minero, Juan José Farías, quien inclusive auxilió en la redacción del documento que se dirigió al comité nacional de su gremio.
Subrayaron tener confianza plena en el comité local y nacional para encontrar un acuerdo de reinstalación, y que al final de este episodio salga fortalecido una vez más el sindicato minero y las familias mineras.
Tras citar que los primeros rescindidos tienen dos meses en esa situación y 10 días la mayoría de ellos, agradecieron las expresiones de solidaridad que les han dado compañeros de los diferentes procesos que integran la planta acerera, que los están apoyando económica y moralmente.
Reconocieron que se prendieron los focos de alerta sobre los despidos hasta que ocurrían de forma masiva, a un ritmo de 10 por día en la semana del 19 al 23 de junio, y según se dijo, había un plan para que fueran no menos de 400, mismo que se detuvo por la intervención del sindicato.
Vicente García Quintana, refiere sin tapujos “Nos dieron de baja porque somos incómodos para la empresa”, ello luego de que este reportero les señalara que hay versiones de que están pasando dificultades por bajas del Seguro Social y haber sido boletinados a otras empresa para que eviten contratarlos.
“La empresa con boletinarnos, hace una forma de presión para que aceptemos lo que quiere dar”, dijo en referencia a una indemnización económica por el tiempo que han prestado servicios que van de 13 a 35 años, según el rescindido, que no es lo que buscan, sino un regreso a sus labores.
Y es que hay señalamiento de que algunos, queriendo emplearse temporalmente, mientras sindicato y empresa toman un acuerdo, al momento de la entrevista, se les informó que la acerera los boletinó para que no les den empleo. “Lo dicho, es una forma de presión”, insistió Vicente García, quien fuera funcionario sindical.
Respecto al IMSS, hubo algunos que de inmediato quedaron desprotegidos, aunque los servicios, por ley, deben proteger y prestarse dos meses más, indicaron.
