CONCESIONARIA DE AUTOPISTA SIGLO 21, SE HA LLENADO EL BOLSILLO DE DINERO, POR PEAJE

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La estimación de ingresos por cuota de peaje en la mal llamada autopista Siglo 21, proporcionada a la SICT por parte de la Concesionaria Autopistas de Michoacán, S.A. de C.V.

* Autopistas de Michoacán logró una primera ampliación de su concesión en 2012, por 30 años y luego en 2023, obtuvo una segunda ampliación hasta por 60 años, la cual vencerá el 31 de marzo de 2072.

Por Rafael Rivera Millán

La empresa de nacionalidad mexicana, denominada Concesionaria de Autopistas de Michoacán, S.A. de C.V., desde el 2012 en que obtuvo de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), hoy llamada SICT, la primera ampliación de dicha concesión, ha ingresado a sus arcas un total de 12 mil 389 millones, 331 mil 017 pesos por concepto de cobro de peaje hasta el 31 de diciembre del 2023.

Recursos que no se han reflejado según la apreciación de usuarios de esta carretera mejor conocida como la “Autopista de la Muerte”, no solo en su ampliación a 4 carriles a la que está obligada, sino a la mejora de diversos servicios, como lo son los sanitarios y el adecuado mantenimiento de la carpeta asfáltica.

Asimismo, de acuerdo a las estimaciones contenidas en un oficio dirigido a la Dirección General Adjunta de Seguimiento de Concesiones de la entonces SCT, por parte de Salvador Lucio Hernández, Coordinador de Concesiones de dicha empresa, en donde adjunta, para los efectos conducentes, el anexo 33 del Título de Concesiones conferido el 30 de marzo de 2012, en donde señala los ingresos a obtener del 2024 al 2027, que es cuando termina el sexenio del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, la captación de 6 mil 109 millones 801 un mil 848 pesos, y del 2028 al 2042 cuando concluye la primera ampliación del título accionario a la concesionaria de Autopistas de Michoacán, S.A. de C.V., un monto total de 27 mil 657 millones 420 mil 484 pesos, para dar un total de ingresos estimados por cobro de peaje entre 2012 y 2042 de 46 mil 156 millones 553 mil 349 pesos.

Con fecha 13 de mayo de 2010, la entonces SCT publicó en el Diario Oficial de la Federación la convocatoria número 02 relativa al concurso público internacional número 9076-002-10 para el otorgamiento de una concesión de jurisdicción federal para construir, operar, explotar, conservar y mantener, entre otros, esto, además del libramiento de Morelia y del libramiento de Uruapan, el tramo de la autopista Siglo 21 Pátzcuaro-Uruapan-Lázaro Cárdenas, de 272 kilómetros de longitud por un periodo de 30 años, concurso que fue otorgado a la Concesionaria Autopistas de Michoacán, S.A. de C. V

Sin embargo, con fecha 4 de abril de 2023, la SICT hizo una segunda modificación al título de concesión a Autopistas de Michoacán, cuya vigencia, ahora, es de 60 años contados a partir del 31 de marzo de 2012.

De igual manera, el 4 de abril del año pasado, la SICT modificó el anexo 11 “Bases de Regulación Tarifaria” del Título de Concesión respectivo, para incrementar tarifas de cobro de peaje en un 15% como máximo en todas las autopistas del paquete Michoacán.

Asimismo, la autoridad federal refiere que en la cláusula Sexta del convenio firmado entre la SICT y Autopistas de Michoacán en abril de 2023: “La Concesionaria se obliga a invertir los recursos derivados de la ampliación del plazo de vigencia de la concesión y el incremento que se autorizan mediante la presente modificación del título de concesión, para la ampliación de dos a cuatro carriles de un tramo de la Autopista Uruapan-Nueva Italia-Lázaro Cárdenas, de aproximadamente 65 km, asimismo, la concesionaria se obliga a construir, operar, conservar, explotar y mantener dichos carriles adicionales, objeto de la referida ampliación”.

Así es que mientras la concesionaria construye a paso de tortuga la ampliación de 2 a 4 carriles a lo que está obligada hasta desde Uruapan a Lázaro Cárdenas, sin tener la certeza de cuando se iniciaría el tramo Cuatro Caminos a Lázaro Cárdenas, seguirán pasando los años y las arcas de Autopistas de Michoacán se seguirán llenando de los recursos que pagan los usuarios de esta “carretera de la muerte”, en donde cada día es más difícil transitar por el gran flujo de camiones de carga y de uso particular, sobre todo en temporadas vacacionales.