Por César Cabrera
Para el desarrollo de las Zonas Económicas Especiales (ZEE), las empresas denominadas como “ancla” tendrán que cumplir con una serie de criterios fundamentales que hace unos días fueron revelados por la autoridad encargada del proyecto federal, encabezada por Gerardo Gutiérrez Candiani.
Entre estos criterios destaca que en su proyecto de inversión, las empresas se comprometan a destinar un monto por 90 millones de dólares en cinco años; crear un mínimo de 800 plazas de trabajo y ocupar una superficie de al menos 20 hectáreas en los polígonos que se han decretado para estos proyectos.
Las ZEE, proyecto que heredará la próxima administración federal, están pensadas para que las “empresas ancla” que ahí se instalen, desarrollen a su alrededor un clúster industrial, mismo que genere empleos y contribuya, en el mediano y largo plazo, en la economía de los estados donde hay una mayor concentración de personas en situación de pobreza o pobreza extrema.
El actual gobierno de Enrique Peña Nieto ofrece a estas empresas un jugoso paquete de beneficios administrativos y fiscales (como un descuento del 100% del ISR durante los primeros 10 años), para que decidan instalarse allí.
Hasta el momento, el Ejecutivo ha decretado la creación de siete ZEE en ocho estados del país: Puerto Chiapas, Chiapas; Lázaro Cárdenas-La Unión, que comparten Michoacán y Guerrero; Coatzacoalcos, Veracruz; Salina Cruz, Oaxaca; Progreso, Yucatán; Dos Bocas, Tabasco y Seybaplaya, Campeche.
La Autoridad Federal para el Desarrollo de las Zonas Económicas Especiales (AFDZEE) es optimista al prever que para los próximos 20 años se podrían invertir unos 42 mil millones de dólares y crear cerca de 367 mil empleos formales.
Pero en una estimación a corto plazo, las ZEE atraerán inversiones por más de siete mil millones de dólares y generarán alrededor de 24 mil plazas laborales.
En momentos en que el país se encuentra en pleno proceso electoral para el cambio de administración federal, la AFDZEE busca dar certidumbre a las empresas al mencionar que las ZEE se encuentran blindadas bajo un marco jurídico “sólido” y que se extiende a todos los niveles de gobierno.
