Por: César Cabrera
En los 41 años que llevan siendo exploradas y explotadas las minas a propiedad del ejido de Playa Azul, estas no han sido rehabilitadas, aseguró la presidenta de dicho Comisariado, Eloísa Berber Zermeño.
Al tiempo de compartir que se logró la firma de un contrato temporal de tres meses con la empresa ArcelorMittal, indicó que esta –más allá de la obtención de un convenio o no-, no se puede desatender de su responsabilidad por reacondicionar las zonas explotadas al interior de las 1,426 hectáreas con las que cuenta la mina.
“Eso no se puede renunciar, eso es un derecho que se tiene. La empresa, para poder entrar a explotar una mina, incluso, para empezar a descapotar, tiene que presentar ante la SEMARNAT (Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales) una propuesta de trabajo y además decir cómo va a restablecer la que dejó atrás; y eso no se ha hecho en 41 años que se tiene explotando la mina”, reafirmó.
La exlegisladora reiteró que dentro de la agrupación que dirige, se seguirá “impugnando” y “luchando” para que estas áreas se restablezcan. No obstante, reconoció que por ahora, en el ejido no han definido las partes de sus tierras a convenir y a su vez, tampoco las que ameritan obras de remediación.
Del mismo modo, señaló que no se ha analizado la creación de proyectos productivos en las minas, aunque dijo que en caso de emprenderlos, se requerirá del apoyo de las autoridades, tales como la Secretaría de Turismo (SECTUR) o de Desarrollo Económico (SEDECO), sobre todo por el tema económico.
Berber Zermeño hizo mención de que en los últimos años, ArcelorMittal había asumido el compromiso de reparar las bombas de agua –cuyo costo por mantenimiento asciende a los 200 mil pesos-, sin embargo, recordó que un día la firma dijo “ya no más” y al menos en este aspecto, la responsabilidad se relegó al gobierno municipal.
La dirigente ejidal, a la par de compartir de que existe una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) por parte de la empresa, donde anticipa a la SEMARNAT de querer seguir explotando las minas hasta el año 2030, cerraría insistiendo que no aceptarán la devolución de áreas no reutilizables y que en caso de firmar otro contrato, solicitarán información sobre el tiempo que tomará la rehabilitación de las 400 hectáreas que de entrada, ya no quiere la trasnacional.
“La cláusula habla de que se tiene que entregar, como antes, las áreas y eso es algo de la ley también. Si se hace un nuevo contrato, tienen que ser puntuales estos puntos y evitar lo de ahora; estaremos pendientes de que se cumpla lo estipulado ante las instituciones ambientales”, concluyó.
