CLAMAN AYUDA POR PÉRDIDAS EN SUS HOGARES Y TIERRAS DE LABOR

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A mitad de una de las calles llenas de lodo que dejó el desbordamiento del río Acalpican, el Encargado del Orden y el presidente del Comisariado Ejidal del lugar, así como habitantes del poblado relataron a este diario las penurias que vivieron y que siguen pasando a consecuencia del huracán “Nora”. (Foto: Kike Rivera).

* Habitantes de Acalpican piden el apoyo urgente de los tres niveles de gobierno, pero dicen, no se debe politizar la ayuda.

Por Rafael Rivera Millán

Acalpican de Morelos, municipio de Lázaro Cárdenas, Mich., septiembre 02.- A petición del Encargado del Orden de este lugar, Eliseo Castañeda Muñoz y del Presidente del Comisariado Ejidal, Eduardo López Gutiérrez, este diario realizó un recorrido por una pequeña parte del poblado, en donde se pudo constatar los daños que dejó la lluvia del huracán “Nora”, que provocó que se desbordara el río Acalpican, inundando infinidad de viviendas e incluso el Centro de Salud, que dicen los lugareños, ha sido declarado como pérdida total.

Aquí se pudo observar a mujeres, hombres y niños escombrando sus hogares llenos de lodo, ropa totalmente mojada y escoger también “a ver qué nos sirve”, dijeron, de ropa usada que les anduvo repartiendo Protección Civil y elementos del Ejército Mexicano, porque afirmaron, pudieron salvar muchas pertenencias, lo importante era poner a salvo a niños, jóvenes y sobre todo a los adultos mayores, porque hubo sitios en donde el agua, al desbordarse el río Acalpican, a las casas se les metió hasta dos metros de altura.

Luego de recoger testimonios de las familias afectadas, el Presidente del Comisariado Ejidal, quien dijo ser oriundo del lugar, señaló que lo ocurrido entre sábado y domingo pasados, solamente se tenía memoria de algo similar hace 71 años, en 1950 cuando el río también se desbordó e inundó las pocas casas que en ese entonces había.

Una señora dijo que les han llevado colchones, pero uno por familia, por lo que es necesario más apoyo de este tipo, pues la familia no puede dormir amontonada en un solo colchón. “Nos han traído despensa, pero eso es momentáneo, además de que cómo cocinamos, si nuestras estufas están llenas de lodo, inservibles ya”, expresó.

Se nos pidió acudir al Centro de Salud del lugar, el cual también se inundó hasta dos metros de altura. Ahí encontramos a una doctora que dijo ser la responsable del lugar, quien dijo que ya la Jurisdicción Sanitaria tiene conocimiento de que todo lo que había ahí es pérdida total, por lo que para poder dar atención a los enfermos, se les traslada al Centro de Salud de La mira.

Sin embargo, el Encargado del Orden dijo que era urgente que sin distingos partidistas, representantes de los tres niveles de gobierno acudan en su auxilio, porque así como están las cosas, se puede venir una epidemia y será muy difícil andar llevando a los enfermos a La Mira o a otros lugares, porque luego además no los quieren atender, pues les dicen que no pertenecen a esos sitios, que quien los tiene que revisar o diagnosticar es en el Centro de Salud de Acalpican, pero así como está, no hay forma de nada.

Además Eliseo Castañeda afirmó que ya al lugar acudió la alcaldesa Itzé Camacho, pero que lo ignoró como primera autoridad del lugar e incluso tampoco hizo caso del censo de afectados que ya tiene y que fue realizado de común acuerdo con los habitantes del lugar. “A final de cuentas no importa que me ignore, lo que se necesita es que se apoye a quienes han perdido todo, pero que no lo politice la alcaldesa”, comentó.

También mencionó que la bomba y el pozo artesiano se dañaron con la crecida del río Acalpican, por lo que desde el fin de semana no tienen agua potable, siendo suministrado el vital líquido a través de una camioneta de un particular, que de manera voluntaria presta su unidad, a la cual solamente se le suministra gasolina, para que en dos grandes tinacos se distribuya algo de agua a los hogares, demandando también que el Capalac mande una pipa, porque en algunas partes la camioneta no alcanza a transitar.

Indicó que si bien les va, esto es, si se consigue que el Capalac o alguna otra autoridad los apoye, tardará de unos 5 a 6 meses, en volver a habilitarse el nuevo sistema de agua potable del lugar.

Por parte el Comisariado Ejidal nos pidió acudir hasta el puente que cruza la carretera Acalpican-Habillal, desde donde relató que hay entre 50 a 100 hectáreas de diferentes cultivos, muchas de ellas dañadas en su totalidad, sembradas de plátano, papaya, cocotero, mango y maíz, además del ganado ahogado que fue arrastrado por la fuerte corriente del río Acalpican, por lo que es necesario que las autoridades de los tres niveles de gobierno acudan hasta ese sitio, y no desde un escritorio, se haga un recuento, censo y avaluó de todos los daños sufridos, para ver en qué forma se les apoya.

Tanto el Encargado del Orden como el Presidente del Comisariado Ejidal y los habitantes de Acalpican coincidieron en señalar sobre la necesidad urgente de desazolvar y enrocar el río, porque ese es la raíz del problema, ya que el lecho del afluente está lleno de desechos que bajan del área de Minas de la empresa ArcelorMittal, de la que demandaron también acuda en su apoyo.