FEMINICIDIOS Y VIOLENCIA CONTRA MUJER, POR UNA CULTURA PATRIARCAL: ROCÍO LÓPEZ MACIEL

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Estrella del Rocío López Maciel, directora de la Casa de la Cultura Jurídica de Morelia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en Morelia.

* Por estereotipos y roles arraigados en nuestras sociedades, se mata a las mujeres, dice conferencista.

Por Francisco Rivera Cruz

A la mujer se le viene regateando el derecho a la justicia, por lo cual, se repiten los delitos y se llega a crímenes de odio y a la revictimización, expresó la maestra Estrella del Rocío López Maciel, directora de la Casa de la Cultura Jurídica de Morelia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en Morelia.

En esta ciudad portuaria, al dictar en la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la charla “Mujeres seguras; Redes salvavidas”, aseguró que por estereotipos y roles arraigados en nuestras sociedades, se mata a las mujeres, y hay una corriente de opinión que mantiene la creencia que la mujer debe tener rol solo doméstico y de crianza de los hijos.

La activista hizo un recorrido por la historia de la humanidad, las etapas importantes y las luchas sociales de los pueblos, advirtiendo que en todas ellas ha estado presente la mujer, pero se le invisibiliza, margina y entrega un rol de hogar como una cultura patriarcal que seguimos adoptando como una carga mental.

Hoy la mujer no está entre cuatro paredes, pero los sistemas siguen poniéndola al margen, y por ejemplo, para el sistema de justicia, se le sigue viendo como alguien inferior, y si bien ocupa cada vez más espacios de dirección y toma de decisiones, no gana lo mismo o se le prefiere subordinada.

La humanidad ha vivido cuatro etapas de feminismo, para ver los actuales resultados, y apenas en la tercera, se le permitió ir a la universidad, encontrando que muchas, aunque quieren no se superan por la carga que representan los hijos.

Destacó la ponente que los avances de la humanidad se ven frenados cuando todavía hay quien lamenta o ve como tragedia que nazca una hija; a la mujercita se le destine a matrimonio forzado o matrimonio infantil.

Describió López Maciel que en los casos de trata, se encuentra que mujeres y niñas hacen el 85% de los casos, se común la violencia sexual y doméstica, desde el acoso hasta el abuso íntimo, y la peor manifestación, el feminicidio, se cometa por celos, porque no permita la mujer ser sometida o porque no se le quiere ver en libertad.

Presentó algunos casos de mujeres que salieron a la escuela o trabajo y no volvieron a verse con vida, de los que la justicia concluyó que se trataba de suicidio, pero su familia, generalmente su madre, no quedaba satisfecha y tomaban las investigaciones por sí mismas, y ante evidencias se reabrieron los expedientes.

Un caso llegó hasta la Suprema Corte de Justicia, es el de Mariana Lima; hoy su madre, Irinea Buendía, recorre el país en apoyo a otros casos en los que la autoridad cerró expedientes a pesar de las sospechas o evidencias de que no hubo justicia en equidad de género.

Otro, el conocido como del Campo Algodonero, en la etapa crítica de Ciudad Juárez, paró en la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, que se falló contra México, encontrando culpabilidad del estado mexicano por desaparición y muerte de tres jóvenes, a las que no se protegió, y ocurridos los hechos no investigó y por ende no castigó. El caso se reabrió y dio con asesinos seriales.

Respecto a que el 8M colectivos feministas marchan, gritan, pintan y protestan, dijo que se ha hecho de todo para hacerse escuchar, como usar sus redes sociales para denunciar, hacer unión para defenderse, han logrado acceso a las universidades, alcanzado el derecho de votar y ser votadas, igual que el derecho a métodos anticonceptivos.

Señaló que en menos de 300 años se han logrado muchos alcances por detener la violencia y el feminicidio, sin faltar dificultades y retrocesos, siendo que en derecho a la expresión hacen ruido con los hashtag #yosítecreo, #nosqueremosvivas #mexicofeminicida y otros.

La conferencista, que estuvo en esta ciudad a invitación del programa Mujeres de Acero, concluyó deseando que desde el hogar se trabaje en la educación para desterrar la pandemia de la violencia.